Amazonas, la gran culebra.

«Los rayos de sol se colaban entre las nubes proyectando la luz al río deslumbrándonos fugazmente. Las bruscas turbulencias de la avioneta cessna sobrevolando selvas y junglas primarias cortan la respiración. El espectáculo es sobrecogedor. De repente otro viraje nos hace dar un respingo del asiento tragando saliva. La carga alojada en el compartimento de cola golpea con fuerza el fuselaje cuando descendemos vertiginosamente. Volando a una cota rasante, observamos unos ibis escarlata que levantan el vuelo debajo de nosotros y unas garcillas que hacen lo propio asustadas. Búfalos de agua saltan torpes por los pantanales ante el escándalo del…